Como la primera vez.

Como duele ver caer el cielo como lluvia de recuerdos sobre la piel, te busqué, te inventé entre cada sueño roto, de los restos de mi fe.
Y tú, tan imposible de olvidar lejano a mi fragilidad, como si nada y aquí estoy, las alas rotas y un por qué... muy tarde abrí los ojos a la verdad de lo que dejé escapar.

Desesperada aquí me ves quebrado en mil pedazos, caigo a tus pies, como un trozo de pasado
que no sabe como hacer. Desesperada por volver al agua de tu amor que calme mi sed y aquí estoy ahogado en lágrimas de ayer como la primera vez.

Dime como hacer para vestirme con la ténue bendición de tu desnudez, devolver el reloj, y escribir nuevas historias en el libro de tu amor. Y así salvarme de esta maldición volver a unir los lazos de la razón, que me faltaba. Y mírame, que te hablo con el corazón. No digas que es muy tarde para pintar cielos de felicidad.